Para el mes de febrero hemos preparado una completa oferta en la que combinamos senderismo con actos de nuestro carnaval tradicional: Las Burras de Guimar y El Baile de Piñata de Teno Alto.
Teno, esencia de tradiciones (con asistencia al Baile de Piñata de Carnaval)
El próximo sábado 25 de febrero tenemos preparada una completa jornada de tarde-noche para disfrutar de un mágico encuentro con las tradiciones más ancestrales de Tenerife. El caserío de Teno Alto es uno de esos pocos lugares que guardan la esencia rural de la isla. Este rincón del Parque Rural de Teno nos seducirá en esta ruta guiada con sus edificaciones tradicionales, eras, tagoras, aljibes, hornos… Además disfrutaremos de diversas demotraciones artesanales: salto del pastor, elaboración tradicional de tejas y elaboración de queso. Degustaremos los tradicionales rosquetes de huevo de El Aderno. Tendremos un especial contacto con un joven cabrero y pasaremos un agradable rato en La Venta del caserío disfrutando del afamado queso de cabra de la zona. Y en la noche, al son de tambores y cuerdas, entre isas y tajarastes, participaremos en una de las manifestaciones culturales con más autenticidad de la isla, el Baile de Piñata de Carnaval de Teno. Más información
Guimar, entre malpaises y burras (con asistencia al acto de carnaval las Burras de Guimar)
El próximo viernes 24 de febrero nos desplazamos hasta Guimar. Allí disfrutaremos a partir de las 15 horas de una ruta guiada por la costa para disfrutar de uno de nuestros ecosistemas más representativos: el malpaís. Desvelaremos todos sus secretos, como su vegetación con diferentes especies endémicas, entre las que destacan las tabaibas y cardones centenarios que dan forma a un paisaje que nos acerca a los orígenes de las islas. Y tras la ruta continúa la magia con Las Burras de Guimar. El espectáculo comienza con la aparición de unas extrañas mujeres que se acicalan para salir al anochecer, algo que se consideraba de mal augurio. Una vez pasa la Sardina delante de ellas, se transforman en burras y se unen a la comitiva. Cuando llegan a la plaza las burras comienzan a encararse con un grupo de campesinos que inquietan por su extraño aspecto y deciden descubrir si se trata de las famosas Burras. Es entonces cuando las burras recobran su aspecto de brujas y comienza el aquelarre. Su locura llega a tal extremo que incluso invocan al demonio, el cual aparece acompañado de numerosos diablillos. Las brujas bailan con los diablos llenando la plaza de un auténtico estrépito, hasta que se comienza a oír una música religiosa que indica la presencia de la Inquisición. En ese momento hace su presencia en la plaza un grupo de frailes acompañados por un obispo. Al llegar a la puerta de la Iglesia el obispo lanza un exorcismo aclamando la ayuda del Arcángel San Miguel. Éste aparece en el cielo acompañado de varios ángeles, y se dirige a luchar contra el gran demonio. El demonio queda abatido en el suelo y entonces el obispo ordena la quema de las brujas en la hoguera, cuyas llamas también servirán para consumir las Sardina del pueblo. Y luego baile de disfraces al son de orquestas. Más información